Te extrañaré cuando te vayas...

No me gustan las despedidas. Y un amigo me ha contado que se va, y lo peor que no lo veré con la frecuencia con la que solía verlo. Voy a extrañarlo como miércoles, eso ni dudarlo, así que desde ahora trato de hacerme a la idea de que no lo veré hasta no sé cuándo, y por lo menos esta semana trataré de disfrutar de su presencia y compañía los momentos que pueda. Él ha sido como un hermano mayor para mí, con la diferencia de que tenemos la misma edad, pero los consejos que me dió y el apoyo que me brindó en los peores momentos de mi vida han sido significativos. Aún hoy, cuando yo no le cuento mis problemas, o mejor dicho, no le cuento lo que siento, él los sabe o los sospecha y siempre me pregunta y anda al tanto de lo que me pasa. Carajo, lo voy a extrañar mucho. Ya tendré tiempo de hablar y contarte de lo bueno que es este amigo, de lo mucho que me ha ayudado, y de todo lo que significa para mí. Sin lugar a dudas, es uno de mis mejores amigos, al menos yo lo considero así. Y si me ha confiado ese secreto, pues pienso que por lo menos su amiga soy. Claro, hay cosas de las que me ha dicho que no podré contar a nadie, a nadie!!! Sí sí, lo entendí. No sé cómo irá a pasar todo, yo sólo estaré a la expectativa y esperando. Pero estoy triste, pienso en que no voy a verlo y pienso que el día que se despida voy a llorar, así que mejor iré llorando de a pocos, de hecho, se me salen las lágrimas de pensar en que se va, aunque es por su bien y eso me alegra mucho, muchísimo, y sólo espero poder seguir contando con él, como hasta ahora.