jueves, 30 de diciembre de 2010

Día Cero

Estoy a punto de terminar el año... Sí, a punto de terminar este año de miércoles. Y es por eso que aprovecho para "inaugurar" este blog. Tercer blog en mi vida. Bueno, sin contar el colectivo musical. Pero es que aquí quiero escribir sólo lo que me pasa, ya sin nombre propio ni seudónimos, sólo escribir mis vivencias y compartirlas con la gente que también quiera hablar de lo mismo.
Decía que se va este 2010. Empezó relativamente bien, y a medio año no lo fue tanto. Ha sido un año de locos, de locuras, y de grandes decepciones.
Sólo espero que este año que viene sea mejor. Puse todas mis esperanzas en que este año sea mejor que el anterior, en que lo que me había pasado el año anterior pudiera ser enterrado y olvidado y ser feliz, o tratar de ser feliz y continuar mi matrimonio con la felicidad de antes, pero en vez de eso me dí con más desviaciones en mi camino, y cedí ante la tentación... pero es que sólo quería amar, en el buen sentido de la palabra,y no conté con que esa persona no me iba a corresponder. Cosas que pasan le dicen. Cosas que nunca entenderé. Y lo peor, fue ser descubierta, riesgo al que me expuse pese a que sabía que si eso ocurría perdería demasiado, pero seguí. Y todo en vano, porque ahora ni siquiera tengo al amigo que tanto quise.

¿Sabes? Nunca le había prestado atención a la letra de una canción, de una telenovela a la que me he pegado en las noches, que ya es pasada, pero le agarré el gusto :P

"Que seas feliz, feliz, feliz,
es todo lo que pido en nuestra despedida
no pudo ser después de haberte amado tanto
por todas esas cosas tan absurdas de la vida.
Siempre podras contar conmigo
no importa donde estés
al fin que, ya lo ves, quedamos como amigos
y en vez de despedirnos con reproches y con llantos,
yo, que te quise tanto, quiero que seas feliz, feliz, feliz".


Sí, yo que lo quise tanto, quiero que sea feliz... No sé si él quiera lo mismo para mí, pero yo sí sé que lo quise mucho, muchísimo, y él a mí no, ni siquiera como amiga :(.
No siempre se gana, pero me quedaron bonitos recuerdos, que a veces quisiera olvidar, porque me hacen daño, porque llenan mis ojos de lágrimas. Ya pasaron siete meses, y aún sigo con esa tristeza en el corazón, con las ganas de llorar a mares, y lo peor es no poder hacerlo. Alguno de ustedes sabe cómo se siente eso? Horrible no? Tener que esconder los sentimientos, tener que aparentar alegría cuando el corazón está triste, tener que sonreir cuando lo único que se quiere hacer es llorar... No hay forma de ser feliz, no hay forma de sonreir, y sin embargo, debes hacerlo. No es hipocresía, al menos no lo veo así, sólo es aparentar para que los demás no se preocupen de ti.
Y, ¿sabes qué es lo que más duele? Haber perdido la amistad de esa persona. Yo quise mucho a ese niño, y sé que no era correspondida, pero lo peor es que él no quiere mi amistad. Eso es peor. Creo que no hay nada más doloroso que perder una amistad. Y yo la perdí. Sé que él ahora habla de las cosas que hablaba conmigo con otras personas, que comparte sus cosas y vivencias con otra persona, me da tanta pena y rabia a la vez, saber que él ya no me considera su amiga. Y a veces pienso que no debí llegar a tanto con él porque yo lo quería mucho, porque lo consideraba mi amigo. Tengo ahora otros amigos, pero no comparto lo que yo compartía con él. Ni modo, espero algún día olvidar, algún día...