sábado, 1 de enero de 2011

Niño lindo

Conozco hace mucho a un niño muy lindo, o sea, físicamente lindo. Casi no lo he tratado, pese a que hace muuuuuuuucho le eché el ojo (ja), pero hace poco tuve oportunidad de tratar con él, y de comprobar que no estaba equivocada sobre él: es un chico lindo, no sólo por fuera sino también por dentro. Eso es bueno. Tiene mucha nobleza, y eso cuenta mucho. Claro, no tengo más intenciones con él, porque no pienso involucrarme en nada más luego de mi incursión en el lado oscuro. Además, todavía tengo un corazón para curar, un corazón que cuidar y sanar por completo. Además, es chiquillo. Sí, esta vez estoy tomando en cuenta la edad, cosa que antes había obviado. Y no porque no me gusten, es más, no sé por qué los hombres jóvenes me llaman la atención. Pero creo que si volviera a enamorarme debería ser de alguien que tenga mi edad, o la de un ex que tuve, al que le llevaba siete años. Es más, si pudiera, me volvería a enamorar de ese ex, al que todavía le tengo un cariño único, pero nuestras vidas se han separado de alguna manera, y no hay forma de volver a empezar lo que vivimos. Yo creo que si se pudiera, él también volvería conmigo, pero nuestras vidas andan tan cruzadas... en fin... Seguiré mirando a ese niño lindo que gracias a Dios, existe para mi alegría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario