martes, 4 de enero de 2011

Haciendo planes

Se acerca mi cumple, y bueno, hace mucho que no celebro uno decentemente. Solía celebrar en mi casa cuando iban mis amigos, solos, sin invitación, y yo los recibía contenta en casa. Caían solos. Sip. Y mi familia también. No era necesario invitarlos, todos los que se acordaban de mí eran bienvenidos sin necesidad de invitación alguna, así era en mi casa, y eso decía mi papá, que si venían todos eran bienvenidos. Buenas épocas no?. Creo que la última vez que celebré así mi cumple fue cuando a una amiga de la universidad se le ocurrió avisarle a medio salón... luego de eso, al año siguiente, no hubo celebración, ya que mi abuelita había fallecido menos de un mes atrás. Y al otro año, tampoco, porque yo estaba por dar a luz a mi primer retoño. Luego de eso, no recuerdo haber vuelto a recibir amigos en casa de mis padres, con las justas mi familia. Me daba algo de verguenza encima invitar a gente para que venga a celebrar conmigo, porque yo era la oveja negra, la madre soltera, la que tenía una pareja equivocada, la que tenía una hija sin haberse casado. Mis amistades se redujeron, todo era difícil para mí. Y de ahí, aprendí a celebrar mi cumpleaños fuera de mi casa. Digo "celebrar" porque eso era lo que habían mis amigos, me compraban una torta, cantaban para mí. Después de allí creo que sin querer celebré mi cumpleaños el día de la despedida de solteros de mi primo y su esposa. Acabé más ebria!! jajajaja... Creo que terminé agarrando con un patita que me cogió por sorpresa, pero bueno... Yo venía de una decepción amorosa muy fuerte, para mí fue como un alivio celebrar. Creo que lo invite a la fiesta incluso, pero se fue, algo de eso recuerdo. Luego, al año siguiente, invite (sí, invité), a unos amigos, luego de la celebración del cumple de mi chucky, a unos amigos, para celebrar un ratito. Pero nunca más una fiesta apoteósica. De ahí me casé sin mayor celebración, vienen mis amigos, muy pocos, pero nada más. No hay gran cosa por celebrar. Pero esta vez quiero que sea distinto. Y tengo amigas que quieren ayudarme a que así sea. No sólo un simple almuerzo, no, cumpliré años y quiero celebrar, porque no sé cuánto me quede de vida, porque esta vida no es comprada. Y quiero celebrarla. Tengo ganas de hacer algo diferente, de bailar mucho, de divertirme, de hacer algo para olvidar lo malo que me ha pasado en estos últimos meses. Todavía tengo pena en el corazón, ese niño que no sale de mi cabeza, ojalá salga pronto, quisiera olvidarlo, pero lo quise mucho, y dudo mucho que vaya a olvidarlo con facilidad.
Bien. Esperaré planear más con mis amigas, quiero pasar un cumpleaños único y bonito, que todos recuerden. La invitación está lista. Sólo falta que la acepten ;)

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